RESPUESTA

"El cáncer que te mata
se muere con vos
y no siempre te mata
a veces te despierta" F. C.

La verdad es que no entendés
nada de esto.
El cuerpo de Dardón
está colgado,
como una frazada oreándose.
Tiene un par de tiros en la espalda
es evidente que se escapaba. Y vos me decís que moriste.
Te lo digo porque
tenés la rara impresión
de que era tu amante,
y los dos sabemos que no fue así,
él intentaba intervenir las manos
de las mujeres con sangre pisciana
pero los dos sabemos
que no hay más que una
penetración reducción retractación
la de la carne
no
no entendiste de Dardón más que
su cuaderno de esbozos
su mochila y su campera
no está mal
él es sólo eso
y su llave-tubo-iracunda
su navaja de hueso con pegamento
no son pocas cosas
yo no lo conozco más que eso

Si Dardón se decidiera
si lo vieras en los andenes
mirando una regimiento de torcazas
o coleccionando esa
lluvia de palomas muertas que los domingos a la tarde
marcan el microcentro de vuelta a casa
al olvido
Dardón, que temió el olvido, hoy se deja
olvidar, las refugiadas afganas le importan tan poco
las desgracias siempre amarillas
y carbonosas
sólo se ilumina si piensa que mata
al tipo de al lado en el furgón
un negro-cabeza
lo mira
lo mataría sin razón
usaría su llave tubo
un garrotazo en los ojos-boca-nariz
Dardón es un tipo bajo incapaz de morir
no morirá
será desterrado
limpio de tierra bajo las uñas
limpio de tierra en las ranuras de sus huellas digitales
descubrirá una rupestre
constelación de tetas en tus mails
no
no conocés a Dardón
todavía puede hacer algo
algo mínimo
es capaz de algo heroico
limpiar los vidrios externos
de un piso 37
usar una cuerda para no ahorcarse
es capaz
no lo han capado
sus gallos de riña se amotinan aún


Puede ser encendido si canta
si deja de llorar
el cuerpo es sólo una cruz que nos llama
nos dice acá estoy mimame tocame,
el cuerpo es un vehículo más
por eso a Dardón le gustan
los trenes las bicicletas
vehículos más dignos
que el móvil dactilar
el acero tiene más alma que la carne
no conozco animales o plantas de acero
pero existen hombres de fundición
lo cual hace que el fuego y la chapa
me parezcan más dignas que los fluidos
del cáncer que me come
que las piedras que obstruyen canales
que los besos que traen podredumbre
de muela
que la sangre descansando en el inodoro
no
las bicicletas no se degradan ni brotan
sólo se funden.

Autor: Juan M. Dardón